29/12/09

Resúmenes de realidad

De todos los ritos que marcan el cambio (¿?) del año —una celebración semejante a los cumpleaños individuales, pero a lo bestia: en este caso quien cumple años es la mismísima HHH...umanidad, o gran parte de ella—, uno de los más tontos, junto con, por ejemplo, el de las uvas, es el de los resúmenes de acontecimientos que hacen los periódicos.
        Claro, no podían faltar estos a contribuir en el afianzamiento de la fe en el tiempo, de la fe en que con cada hoja del calendario que rotula 'ENERO' empieza algo: ningún instrumento mejor que el de la prensa para llevar a cabo semejante tarea y asegurar, más si cabe, la superstición del paso del año.
        Y así, a finales de diciembre, tras un año uncidos diariamente a las noticias, cada diario o cadena de televisión hace una selección, resumen, acrisolado, quintaesencia, de los acontecimientos más importantes. Si ya la substancia de la realidad consiste en ser periodística, y aun cabría decir que lo que no sale en los periódicos, y no digamos en la televisión, no existe, el refrito anual es un rito absolutamente in-di-ge-ri-ble, pero del que ningún periódico quiere privar a sus lectores y del que obtienen un puntual e infalible soporte para la publicidad.

No hay comentarios: